Hace falta sensatez,
esto parece un infierno,
por falta de madurez
e ineptitud del Gobierno.
Gastaron en Navidad
hijuemiles de millones,
pudiendo, con honradez,
remediar mil situaciones.
Inútiles matachines,
tupida bombillería,
cuando la lógica grita:
“No era lo que quería”.
Con esos miles millones
de tanta fanfarrería
se llevarían soluciones
para el verano y sequía.
Factorías botando plata,
para negarla esta luego
cuando el campesino vaya
por su Distrito de Riego.
Ahora en esta invernada,
si el campesino hace un ruego,
de maquinaria no hay nada,
vengan después y ¡hasta luego!