EL PREMIO NOBEL DE FÍSICA 2012. Por Manuel Enrique Rey.

EL PREMIO NOBEL DE FÍSICA 2012

Por Manuel Enrique Rey.

Cada año por estas calendas aprecio con inusitado interés el avance de la ciencia en el mundo desarrollado que galardona con el Nobel; y, en silencio lamento como Ingeniero Químico, pertenecer a uno, donde día a día es menor el número de individuos que de manera abstrusa y hasta simpática –me encasillo en ese grupo- trate, fragilizando el entendimiento, de penetrar así sea mínimamente en los arcanos de la ciencia. Podríamos empezar por pensar cuál truculencia mental podría desarrollarse cuando catalogamos las dos palabras por medio de las cuales, éste año la Real Academia Sueca de las Ciencias premió a un francés y a un estadounidense con el Nobel de Física por su estudio. Los dos demostraron con el desarrollo del título que le dieron al trabajo que es posible observar partículas cuánticas individuales sin destruirlas. Un avance científico que valora un avanzado estudio de la física que guarda relación con la Óptica Cuántica.
Generalizando, dentro de la escala del universo que conocemos los humanos y teniendo por unidad al humano, la escala podría ampliarse hacia lo grande con las estrellas de neutrones, los asteroides, los núcleos de las cometas, estrellas enanas y planetas similares a la tierra, los planetas gigantes por ejemplo Júpiter, el sol, las atmósferas externas de estrellas gigantes rojas, el sistema solar, las nebulosas gigantes y las nubes moleculares, la galaxia de la vía láctea, los grupos de galaxias, los cúmulos y súper cúmulos de galaxias hasta la totalidad del universo observable; y, reduciendo el tamaño: moléculas de ADN, células vivas, átomos, núcleos, protones, neutrones, cuanto de espacio y hasta partículas que físicamente adolecen de dimensiones.
“Se trata de un campo de investigación activo que estudia la acción fundamental desarrollada entre fotones, es decir entre las partículas de luz y la materia. De hecho, cuando nos vemos los unos a otros es la interacción entre la luz y la materia la que nos permite hacerlo”. El problema empieza cuando determinadas partículas muy pequeñas como serían los protones o los neutrones tratan de observarse por medio de fotones u otras fuentes de luz de pequeñísima onda corta energética. Al moverse la materia observable debido al choque, no permite que conozcamos su posición exacta; y hasta destruirlos, que parece fue lo que evitaron por medio de un estudio teórico-práctico los científicos merecedores del Nobel de física éste año.
El estudio científico será aprovechado como avanzada utilitarista. Para tal fin se modificó el ambiente y la calidad de las partículas cuánticas estudiadas, yendo incluso en contra del tradicional Principio de Incertidumbre de Heisenberg. Las “partículas curiosas” son en este caso los fotones emitidos por un láser, cuyos cambios tras interactuar con los iones, se pueden apreciar incluso a simple vista. El láser también permite controlar varias de las características de los iones, lo cual se cree permitirá crear computadoras cuánticas -dispositivos que harían lucir a nuestras actuales computadoras como vulgares ábacos; y, los relojes con precisiones y exactitudes no imaginadas por los humanos entre otros importantes avances culturales-.

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