” Y decidió atacar el día de la gran derrota” … Apocalipsis.
Hoy llevo un Hiroshima entre las venas,
han explotado en mí bombas atómicas,
de neutrones, silencios y de penas…
Nada promete salvarme del desastre
y siento entre la sangre…
el tañido infernal de mil cadenas.
Han explotado en mí todas las guerras,
los odios y las hambres,
y de Gog a Magog grandes ejércitos
se juntan en mi contra como enjambres.
A mi favor, !Yahvé de los Ejércitos!
y un hilo de sobriedad como estandarte.
“Se decidió atacar el día de la gran derrota”,
cuando todo parecía insuperable.
Ha empezado en mí el Armagedón,
la última guerra…
!El último desastre de la tierra!
¡Qué poesía más hermosa, Napo! Te felicito por esa capacidad especial de poder transmitir los sentimientos a los demás por medio de la poesía. En estos tiempos esta virtud que posees ya es escasa.