EL CHA CA CHÁ DEL TREN. Por Óscar Humberto Gómez Gómez. ( * )

 

La historia del ferrocarril está cargada de anécdotas a partir de las cuales se compusieron bellas y alegres canciones. Una de ellas fue “EL CHA CA CHÁ DEL TREN“, en la que el anónimo autor tomó como inspiración la onomatopeya del sonido que produce el desplazamiento de la locomotora y los vagones sobre los rieles, y —desde luego— toda la carga de fiesta que desencadenaba el ir llegando a las diferentes estaciones, en aquellas épocas en las que el tren aún era una novedad. Los cantantes Olga Chorens y Tony Álvarez, artistas integrantes de la célebre orquesta LA SONORA MATANCERA, interpretaron esta canción, que fue una de las piezas más festivas que se hicieron alrededor del tema del tren.

 

CARÁTULA DE "HISTORIA DE BUCARAMANGA". ACADEMIA DE HISTORIA DE SANTANDER. CASA DE BOLÍVAR. BIBLIOTECA.

CARÁTULA DE “HISTORIA DE BUCARAMANGA”. ACADEMIA DE HISTORIA DE SANTANDER. CASA DE BOLÍVAR. BIBLIOTECA.

 

La historia de Bucaramanga, nuestra tierra natal, también quedó marcada en lo más hondo de sus entrañas por el tortuoso y difícil trasegar que tuvo la construcción del ferrocarril a Puerto Wilches, la cual se llevó a cabo en sentido contrario, trayendo el tren hasta Bucaramanga, obra que solo llegó, primero hasta Bocas, y después hasta el Café Madrid, sin entrar jamás a las calles de nuestra ciudad, como estaba proyectado. Infortunadamente, allí, en el Café Madrid, murió el tren. Hoy, ante las ruinas de la estación —que era un monumento nacional e histórico de gran valía, reducido a cenizas por un implacable incendio— y ante la tristeza de los vagones oxidados, convertidos en el hogar de los sin futuro, de los desplazados por la exclusión social y la violencia, solo podemos traer la música pegajosa de “EL CHA CA CHÁ DEL TREN“, para recordar los tiempos idos del nuestro, de aquel tren que se nos fue y que las nuevas generaciones de santandereanos ni siquiera alcanzaron a conocer. Atrás, en el pasado, quedan, pues, los enrielados, los terraplenes, los polines, las eclisas, las traviesas, los clavos, los vagones, las locomotoras, los tambos, las estaciones, los maquinistas y el pito inconfundible del progreso. Parodiando la famosa frase de “El Rey ha muerto…¡que viva el Rey!”, hoy podemos decir, con un inevitable dejo de nostalgia: “El tren ha muerto…¡Que viva el tren!”.

 

 

* Miembro de la Academia de Historia de Santander, Miembro del Colegio Nacional de Periodistas, Miembro de la Sociedad de Autores y Compositores de Colombia, y Miembro del ilustre Colegio de Abogados de Santander.

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3 respuestas a EL CHA CA CHÁ DEL TREN. Por Óscar Humberto Gómez Gómez. ( * )

  1. Gloria Betancourt dijo:

    Recuerdo el tren a Puerto Berrio.

  2. Mafalda dijo:

    Hermoso. Excursión 1976 del colegio La Merced. En tren a la costa!!!!. Hermoso!!!!!

  3. Mirza Gómez Aranguren dijo:

    Una gran nostalgia de épocas muy gratas que dejan indelebles recuerdos.

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