Al oeste se incendia ya el paisaje
Con fuego de arreboles purpurinos,
Mientras suenan en la radio aires andinos
Y se esconde un canario en el follaje.
Atardece en mi solar, se va el celaje,
Regresan a su hogar los campesinos,
Se pueblan de escolares los caminos
Y empieza a oscurecer en el paraje.
Tierra noble a la que amo con coraje,
Patria chica a la que llevo en mi linaje,
Santander de resplandores diamantinos:
Edén fuiste de caudales cristalinos,
Te embriagabas con tus flores y tus vinos,
¡Que renazca, fraternal, tu paisanaje!
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ILUSTRACIÓN: Atardecer en Bucaramanga. Fotografía de Julián Rueda Blackburn.
¡Gracias por compartirla!
Bien….muy bien, con color y sabor de Santander.
Respetado Dr. ÓSCAR HUMBERTO: su poema, excelente por cierto, ya forma parte de mi Diario 2016, y otros, también. Siga así, enalteciendo nuestra cultura y literatura de esta Nación, tan agobiada y doliente. Su música es una píldora para el alma santandereana.
Hermosos matices, captados con la lente inspiradora de un soñador…