Ante tanta corrupción,
Necesitamos que urgente
Usted, señor Presidente,
Diga no a la prescripción.
No debe nunca el ladrón,
Con su disfraz de decente,
Salirse por la tangente
Y eludir su obligación.
No debiera magistrado,
Ni juez torcido y malvado
Salir con jubilación;
Y al funcionario comprado,
Que aspirara a pensionado,
Debieran darle… ¡ prisión !