¿Realmente es cierto que no existió Manuela Beltrán? (Tercera parte) Por Óscar Humberto Gómez Gómez

 

La Radio Nacional – radiodifusora del Estado colombiano – publicó en Internet el siguiente informe radial:

“En conversación con Señal de la Mañana, el historiador de Señal Memoria, Felipe Arias, se refirió a la discusión acerca de la existencia de Manuela Beltrán

¿Existió o no? Ese es el debate que ha generado en los últimos días las declaraciones que dio el presidente de la Academia Colombiana de Historia, Armando Martínez, por expresar que no existen indicios que comprueben la existencia de Manuela Beltrán, la primera heroína de la independencia de Colombia.

El profesor Martínez sustenta que no hay indicios acerca de Manuela Beltrán, ya que fue un personaje construido desde las clases populares y que la literatura liberal del Romanticismo volvió un personaje de ficción. Sin embargo, la historiadora Judith Gonzáles, argumenta que Manuela Beltrán ha existido en la conciencia nacional como un personaje popular, el cual la historiografía se ha encargado de construir.

La genealogista Rocío Sánchez encontró una partida de bautismo que pertenece a una mujer que lleva el nombre de Manuela Beltrán, que tiene fecha del 2 de julio de 1724. El asunto volvió a reavivar el debate, ya que la prueba fue presentada ante la Academia Colombiana de Historia, pero dejó una interrogante: Si realmente existió, ¿será esa misma persona de la partida de bautismo, quien lideró la Revolución Comunera?

En conversación con Señal de la Mañana, el historiador Felipe Arias afirmó que la partida de bautismo puede ser un indicio para comprobar la existencia de Manuela Beltrán, por ser documentación que está muy bien conservada y digitalizada.

Pero planteó que: “El problema aquí sería determinar si esa mujer, que tenemos una existencia documentada, que se llama Manuela Beltrán y vivió en el Socorro si fue aquella mujer que dicen otros testimonios que movilizó en la Plaza Pública al pueblo en 1781 y rompió el edicto que imponía una serie de cargas tributarias a la población”.

Arias subrayó que “ese interés de encontrar la existencia objetiva y documentada de personajes es una obsesión que tienen los hombres de la modernidad”, partiendo de la idea que el debate por la existencia de Manuela Beltrán no es el primero que se ha dado en Colombia y el mundo, debido a la dificultad por hallar archivos que validen la implicación política de estos personajes en la historia.

Finaliza mencionando que esta es una oportunidad para reflexionar sobre los cambios que pueden ocurrir en la historia y los relatos del pasado, debido al diálogo constante entre la investigación académica y la memoria histórica, que resulta en una narración diversa sobre el acontecer de nuestro país”.

 

 

Como se observa, dentro de la Radio Nacional y por parte de los entrevistados era total la ignorancia sobre la declaración del alcalde del Socorro Josef Ignacio de Angulo y Olarte, sobre el libro del historiador Manuel Briceño de 1880 donde dicho testimonio aparece insertado como anexo, y sobre el libro del historiador José Fulgencio Gutiérrez de 1939 donde hace expresa mención a que acerca del nombre de la mujer que rompió el edicto existía ya para entonces un debate y que inclusive se decía que se llamaba “Antonia Vargas”, pero que dichas elucubraciones habían quedado zanjadas con el testimonio del testigo presencial de los hechos Josef Ignacio de Angulo y Olarte, alcalde del Socorro en 1781.

Como igualmente se observa, la historiadora Judith González dijo que Manuela Beltrán “ha existido en la conciencia nacional como un personaje popular, el cual la historiografía se ha encargado de construir”, dando a entender su no existencia real. Por cierto, esta historiadora acusó al Dr. Armando Martínez de haberla “plagiado”, porque ella antes que él había sido quien planteó la hipótesis de la inexistencia de Manuela Beltrán.

Como también se observa, el asesor Arias insistió en dudar sobre si aquella partida de bautismo hallada en el Socorro y de la cual reconoció que estaba muy bien conservada, correspondía a la misma Manuela Beltrán que rompió el edicto. Es decir, el historiador que negó su existencia, el Dr. Armando Martínez Garnica, se basó en que nadie con ese nombre había sido bautizado en el Socorro en aquella época, pero ante la evidencia de lo contrario, en la Radio Nacional se pasó de “ninguna” Manuela Beltrán a “varias” Manuelas Beltranes.

Pero, además, tampoco era cierto que hubiese sido una “genealogista” la que había hallado la partida de bautismo de Manuela.

En efecto, en el año 2015, es decir, ocho años antes del año 2023, el diario Vanguardia Liberal, de Bucaramanga, publicó la siguiente nota periodística:

“Debido a comentarios inexactos sobre la sustracción de la partida de bautismo de la heroína socorrana María Manuela Beltrán Archila Sarmiento, el reconocido historiador Álvaro Sarmiento Santander, hizo llegar a Vanguardia Liberal una copia del documento original y la partida de registro expedida en dicha Diócesis de Socorro y San Gil.
Agregó que sobre dicha partida ya tenía conocimiento muchos años atrás.

Por medio de una charla, el abogado Luis Carlos Rangel Franco comentó que siendo su padre don Horacio Rangel, notario de este circuito hace varios años, allí se presentó el historiador Ramiro Gómez a autenticar dicha partida, “por esta fuente logramos hallar este documento para que en la memoria colectiva y para siempre, el nombre de esta heroína y su gesta sean orgullo del pueblo socorrano y un elemento más de la santanderianidad”.

Dicha partida está transcrita en el libro la “Revolución de los Comuneros”, del ilustre historiador Ramiro Gómez Rodríguez, honra de las letras santandereanas.

Custodiado

Por fortuna, este documento permanece debidamente custodiado en el archivo parroquial de la Concatedral Nuestra Señora del Socorro, que facilitó la investigación.

Algo de historia

Las revoluciones en sus diferentes etapas van escogiendo a sus protagonistas. Manuela Beltrán, heroína socorrana y actora principal del 16 de marzo de 1781, de 57 años de edad, viuda y con dos hijos, destruyó el edicto que contenía los impuestos, pero su destino estaba marcado por el deseo de la monarquía española de extirpar de una vez y para siempre la rebeldía altiva de los hombres y mujeres de esta sagrada tierra de la libertad. Pocos años después de reprimida la Revolución Comunera por orden del arzobispo virrey, Caballero y Góngora, familias enteras de Tunja, el Socorro y Girón fueron desplazadas a poblar las selvas del Darién.

Transcripción de la partida de bautismo

En el libro de bautismos número 02 folio 78 vuelto aparece la siguiente partida: MARÍA MANUELA

En la parroquia del Socorro, el dos de julio de setecientos veinte y cuatro años, yo. El Mtro. Don Joseph de Lara Mirabal, Theniente de cura en ella condicional, bauticé puse óleo y chrisma a una niña llamada María Manuela, de un mes y veinte días, hija legítima de Juan Beltrán y Ángela de Archila Sarmiento, fue su padrino Nicolás de Cárdenas Barragán. Doy fe, Joseph de Lara Mirabal. Pbro.

La copia fue suministrada por el historiador Álvaro Sarmiento Santander”.

 

El informe aún puede leerse en Internet en el siguiente enlace:

 

https://www.vanguardia.com/santander/comunera/hallan-partida-de-bautismo-de-heroina-maria-manuela-beltran-archila-sarmiento-BYVL312726

 

 

(CONTINUARÁ)

 

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